Tratamiento de trastorno de trastorno bipolar

INTRODUCCIÓN

El trastorno bipolar (TB) es un tipo de trastorno mental de la afectividad crónico. Este padecimiento de tipo afectivo se caracteriza principalmente por la vivencia de fases de hiperexcitación (fases de hipomanía o manía) que se desarrollan en alternancia con otras fases de ánimo decaído e inhibido (fases de depresión), así como también con fases en las que el paciente se encuentra estable a nivel anímico (fase de eutimia).

Los tratamientos integrales para el trastorno bipolar han sido desarrollados con el fin de abordar principalmente los síntomas de manía, así como los síntomas depresivos y también para mejorar la adherencia del paciente al tratamiento farmacológico, cuyo objetivo es tratar los episodios.

En Luxe Recovery MxC., tenemos una opción especializada para atender tu salud mental o la de un ser querido con la garantía del profesionalismo que proporcionamos a cada paciente.

Las problemáticas conductuales para trastornos como la bipolaridad, representan un importante problema de salud que se relaciona con estados de inquietud, problemáticas en el ciclo de sueño, consumo de sustancias, trastornos cognitivos, de la personalidad y comorbilidades con otros trastornos psiquiátricos, ideación y conducta suicida entre otros.

Atender las conductas de riesgo es de vital importancia para un paciente independientemente de su género y edad.

Trastorno Bipolar

¿QUÉ ES UN TRASTORNO BIPOLAR?

El trastorno bipolar representa en forma de episodios recurrentes y cambiantes que van desde la manía o hipomanía (alegría, exaltación o euforia), hasta la depresión profunda (tristeza, inhibición e ideas de muerte). Las variaciones anímicas influyen de forma significativa en los aspectos del entorno, familiares, académicos o laborales de la persona que tiene la enfermedad.

¿Qué problematica se puede desarrollar?

Se puede presentar en casos severos, psicosis maníaca grave, en la cual está comprometida la seguridad y el manejo del paciente, el control urgente de la conducta habitualmente requiere tratamiento integral con farmacología indicada, además de acompañamiento y supervisión clínica que se requiere para atender multidisciplinariamente a los pacientes.

Dentro de la sintomatología se pueden presentar los episodios agudos, que a pesar de considerar menos graves es una sintomatología importante de atender.

LOS SÍNTOMAS QUE SE PUEDEN EXPERIMENTAR INCLUYEN:

SENSACIÓN DE FELICIDAD EXTREMA, ESPERANZA Y EMOCIÓN
IRRITABILIDAD, IRA, ATAQUES DE RABIA Y COMPORTAMIENTO HOSTIL

INQUIETUD
AGITACIÓN
HABLA RÁPIDA
POBRE CONCENTRACIÓN Y JUICIO AUMENTO DE ENERGÍA

MENOR NECESIDAD DE DORMIR
DESEO SEXUAL INUSUALMENTE ALTO ESTABLECER OBJETIVOS POCO REALISTAS PARANOIA

TRISTEZA Y LLANTO
SENTIMIENTOS DE DESESPERANZA, INUTILIDAD Y CULPA
PÉRDIDA DE ENERGÍA
PÉRDIDA DE INTERÉS O PLACER EN LAS ACTIVIDADES COTIDIANAS
PROBLEMAS PARA CONCENTRARSE Y TOMAR DECISIONES
IRRITABILIDAD
NECESIDAD DE DORMIR MÁS O INSOMNIO
CAMBIO EN EL APETITO
PÉRDIDA/GANANCIA DE PESO
PENSAMIENTOS SUICIDAS E INTENTOS DE SUICIDIO

LOS PACIENTES PUEDEN SENTIRSE NORMALES, SIN NINGÚN SÍNTOMA, ENTRE EPISODIOS DE MANÍA Y DEPRESIÓN.

¡En Luxe Recovery estamos listos para apoyarte!"

FAQ

La combinación de medicación estabilizadora del estado de ánimo, como los estabilizadores del ánimo, y terapia psicológica, especialmente la terapia cognitivo-conductual, es comúnmente utilizada. El tratamiento se adapta según la fase del trastorno, con un enfoque más activo en la fase maníaca y estabilizador en la fase depresiva.

La psicoeducación es crucial. Ayuda a los pacientes y sus familias a comprender el trastorno, identificar signos tempranos de episodios y aprender estrategias de afrontamiento. Facilita la adherencia al tratamiento y reduce el riesgo de recaídas.

El monitoreo continuo es esencial para ajustar la medicación según sea necesario y gestionar los efectos secundarios. La colaboración estrecha entre el paciente y el médico es clave para encontrar un equilibrio efectivo con los efectos secundarios y la eficacia del tratamiento.

La terapia cognitivo-conductual y la terapia interpersonal son valiosas. Se centran en mejorar las habilidades de comunicación, la resolución de conflictos y la gestión del estrés. La inclusión de la familia en el proceso terapéutico puede fortalecer el apoyo social.

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